Esta historia que te vamos a contar hoy, desde hace un tiempo que ya circula por las redes. Esta se trata de una mujer que toma la decision de someter a una prueba la relación con su pareja, y termina aprendiendo una gran lección con ella, una que puede incluso darle gracia a mas de uno.
Esta mujer tenia la sensación de que la flama de su relación se estaba de cierto modo, apagando, por lo que tomo la decision de llevar a cabo una idea que a ella le pareció excelente: Quería saber que tan en serio su novio se tomaba la relación, como reaccionaria si ella lo dejara y que sentimientos tenia para con ella.
Para poder conseguir las respuestas a sus preguntas, tuvo la idea de escribirle una carta en la que le avisaba a su novio que su noviazgo con él se había terminado, que estaba cansada y aburrida y que no le encontraba el sentido a seguir estirando una relación que estaba a punto de morir. Recordemos que su propósito era conocer como reaccionaria su novio, no dejarlo realmente.
Cuando termino de escribir la carta en cuestión, la dejo en el escritorio de su novio, donde estaba segura de que la iba a ver y como no quería perderse la reacción de su amado por nada del mundo, se escondió bajo la cama.
Paso un rato hasta que su novio llego a la casa, mientras tanto ella se encontraba bajo la cama, muy nerviosa por lo que podría suceder. Finalmente, su pareja entro a la habitación y comenzó a leer la carta, pero ella no iba a poder creer lo que sucedió cuando termino de leerla. El hombre se puso a silbar mientras marcaba un numero de teléfono en su celular ¿Pero que diablos? pensó ella, entonces escucho a su novio que dijo:
Hola, mi amor. Voy en camino. La idiota por sin se dio cuenta de que la estoy engañando y ha decidido dejarme. Que relación inútil. Estoy muy feliz por haberme librado de ella, desearía haberte conocido antes. Nos vemos en un rato”
La mujer, estupefacta todavía bajo la cama, no sabia que decir, no tenia idea que estaba sucediendo. Permaneció escondida durante varios minutos mientras su novio recogía sus pertenencias. Cuando este se fue del departamento, las lagrimas empezaron a brotar de sus ojos. Totalmente humillada, salió de abajo de la cama.
Cuando se recompuso un poco, se dio cuenta de que en el escritorio había otra carta, era una de su novio e iba dirigida a ella. Muy triste, comenzó a leerla. Una vez termino de leer dicha carta, una sensación de vergüenza y a su vez de alivio se apodero de la mujer. ¿Como pudo ser tan estúpida?
La segunda carta decía: “Tonta, la próxima vez que intentes embaucarme, al menos asegúrate de que tus pies no sobresalgan por debajo de la cama. Fui hasta el mercado a comprar unas cosas. Nos vemos mas tarde”.

Si tienes la intención de poner a prueba a alguien, siempre ten en cuenta que ellos pueden hacerte lo mismo. ¡El que las da, las recibe!
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